Es por esto que mezclar estilos tiene muchas ventajas, tales como:

1. Se pueden aprovechar piezas que en otro momento quizás, no utilizaríamos. Por ejemplo, piezas antiguas que encontramos en la casa de nuestros antepasados o incluso, en ventas de Garage o en la calle. Usando este mismo método, ahorramos incluso dinero.

2. Se le da un toque muy personal a nuestro espacio, ya que muchas cosas provienen de nuestra propia familia. Es por esto que no nos guiamos por las reglas de un estilo concreto, si no que por dos, y jugamos con ellas.

3. Siempre hay que tener cuidado de no recargar ni sobrepasarnos con la decoración, ya que puede parecer sin querer, un espacio confuso, desordenado o recargado. Siempre procura mantener una línea limpia y ordenada al momento de mezclar dos tipos de estilos. Para que esto tenga un buen resultado te aconsejamos planificar bien tu espacio antes de poner muebles o accesorios y principalmente, antes de comprar.

4. Si quieres mezclar estilos, nunca mezcles más de dos. Si mezclas muebles coloniales con rústicos y contemporáneos, finalmente siempre se quedará sobrecargado, aunque sean pocas piezas.

5. No todos los estilos pegan, tiene que tratarse de estilos muy diferenciados para que la mezcla sea perfecta. Muebles coloniales con rústicos raramente quedan bien...

6. Para que la mezcla también quede bien es necesario que exista un estilo principal y otro secundario, un estilo tiene que dominar y del otro escoger pocas piezas.

7. Po último, potencia la iluminación en los puntos de la habitación que quieras destacar. De esta manera conseguirás que aún siendo pequeños detalles destaquen en tu decoración ¡¡¡Mucha suerte!!!