Los detalles hacen la diferencia

Muebles, elección del suelo, color de las paredes, puntos de iluminación, estilo decorativo, textiles… todo es importante pero ¿qué es lo que transforma una vivienda en un hogar y la decoración en estilo? Los detalles. Los pequeños adornos, ese libro que no está completamente recto, esa lámpara que nadie más que tú habría colgado en ese exacto lugar. En decoración los detalles marcan la diferencia. No importa si esos detalles son unas botellas de vino utilizadas para sujetar libros, una jaula hecha a mano complementando un escritorio o utilizada para guardar libros, o unas flores estratégicamente colocadas.

Estas son algunas maneras de que una estancia cobre vida y se vuelva tuya desde el primer momento. En departamentos de alquiler, donde no has podido elegir casi nada de la decoración, esos detalles son de suma importancia porque sirven para apropiarte del espacio, para llenar del estilo que deseas, para que el ambiente sea personal y no de aspecto de hotel o de oficina. No importa cuán feo sea un sofá porque unos metros de tela y unos cojines lo pueden transformar. Un mueble antiguo que te parece horrible, puede llegar a ser un detalle vintage. Unas flores en algo tan simple como una botella vacía pueden alegrar la habitación más fría y triste. Un suelo feo o estropeado por el uso puede transformarse con alfombras. Un recibidor angustioso será acogedor con un perchero y un cuadro colorido, o si hubiera espacio, con unas maletas sobre una alfombra y una bandejita para poner las llaves. Busca usos distintos a los objetos cotidianos, cuelga una lámpara donde debería haber una de pie o sobremesa. Usa las normas para saltártelas o aplícalas a tu manera. Es la mejor forma de que la importancia de los detalles sea la misma importancia que tú tengas en el ambiente de tu hogar. Te sorprenderás de cómo cambia tu casa, cambiando los detalles.